Alguien puso bajo el sol
su verdad por la mañana;
la verdad se le secó.
La verdad se le secó
porque no estaba mojada,
más bien estaba empolvada,
casi nada.
Unos hacen el amor
para vivir sin reservas,
otros le tienen temor.
Y si es la vida el amor
y si el amor es la vida,
¿a qué cosa es su temor,
a la vida?
El que cruza sin mirar
un obstáculo cualquiera
se queda por la mitad.
Pues, si al lanzarte a la meta
llevas los ojos cerrados...
¿cómo sabes dónde está?
Tú sabrás.
Unos hacen por llenar
sus humanidades huecas,
otros las dejan igual.
Por eso es que cualquier cosa
que me llene me apasiona:
para hueco está la fosa...
¡Mariposa, a otra cosa!