Si vinieras a jugar
a la orilla de la playa
se rizaría tu saya
como una estrella de mar.
Olas verías danzar
entre velas y atarrayas
a la orilla de la playa
si vinieras a jugar.
Dentro de algún caracol
el mar esconde su canto
envuelto en su verde manto
que salta y se abre hacia el sol.
El mar, como el girasol,
gira al compás de un encanto,
el mar esconde su canto
dentro de algún caracol.