(Según versión cantada por el conjunto Soporopo)
¡Qué lindo ser voluntario
del trabajo solidario!
¡La patria así se levanta
y el pueblo trabaja y canta!
Ayer encontré a Manuel
que cargaba unos saquitos.
Estaba también su padre
y todos sus hermanitos.
Las manos se hacen obreras
cuando empieza la faena.
Las fábricas le dan vida
y también las oficinas.
La abuela que amasa el pan,
lo reparte presurosa.
Le ayudan todas las madres
y también la Carmen Rosa.
¡Qué lindo ser voluntario
sin pensar en el dinero,
ni en la corbata elegante,
ni el guante, ni el sombrero!
Lo importante es demostrar
la fuerza de los chilenos,
sean chicos, sean grandes,
estudiantes con obreros.