Herminia se quedó sola
esperando que él volviera.
Estaba la puerta abierta
y caliente la tetera.
Se llevaron al poeta,
se lo ha tragado la tierra,
primer día de casados,
llora la novia en su pieza.
Recuerdo el primer encuentro,
piensa Herminia en su poeta.
Yo le espero, manzanita,
desde siglos en la tierra.
Sus ojos negros soñaban,
abrazada a su poeta.
Su cuerpo joven espera
que le devuelvan su prenda.