Alabado sea el niño
que ha nacido en un portal,
su padre es un noble obrero,
su madre es pura bondad.
Alabado sea el niño
que no tiene camisón,
que no conoce la leche
y por un pan es ladrón.
Y por ellos quiero yo
al cantar esta canción
que nuestras manos se unan
al ritmo del corazón.
Alabado el prisionero
que ha sufrido con dolor
toda clase de torturas
y a su hermano no vendió.
Alabadas las Marías
que están en el mundo entero
bordando nuestras banderas
tras la cual juntos iremos.