Brindo, dijo un pescador,
por la proa y por la popa.
Voy a vaciar esta copa
por el ancla y el timón.
Salada queda la ropa
cuando el viento se levanta.
El mar nos da bellas plantas,
magia, sueños, un hechizo,
machas, jureles, erizos,
son las flores del Atlanta.
¡Salud!
Mi vida, llegaron los pescadores,
mi vida, a la caleta remando,
salada es la mar.
Mi vida, lindos botes de colores,
mi vida, una semana pescando,
salada es la mar.
Traigo merluza fresca,
congrio, jureles.
Con buen tiempo o tormenta,
déle que déle,
salada es la mar.
Déle que déle, ay sí,
marisca’ores
pasean a San Pedro,
corona ’e flores,
salada es la mar.
Locos, piure, erizos
pa’ los trillizos.