Tengo una muñeca
vestida de azul,
zapatitos blancos
y gorra de tul.
La llevo a paseo,
se me resfrió
y la tengo en cama
con gran dolor.
La llevo al médico
y me recetó
que le dé jarabe
con un tenedor.
Dos y dos con cuatro,
cuatro y dos son seis,
seis y dos son ocho
y ocho dieciséis.
Seis y ocho veintiocho
y ocho treinta y dos
Estas son las cuentas
que he sacado yo.