Corazones siempre alegres,
rebosando gratitud,
somos los que a Dios amamos,
redimida juventud.
Coro:
Siempre alegres Vamos todos,
llenos de felicidad;
hermosísimo es el camino,
hacía la eternidad,
Dios nos guía de la mano;
nos ampara su poder;
es su brazo poderoso
y nos quiere defender.
Si en la lucha desmayamos
o nos sitia la maldad,
con su gracia nos anima,
nos levanta su bondad.
Con sus fuerzas llevaremos
muy gozosos nuestra cruz;
victoriosos cantaremos
en la gloria de su luz.