Amoroso nos convidas,
Cristo, a la comunión.
Llena ahora nuestras vidas
con tu santa bendición.
A tu grato llamamiento
acudimos, oh Señor;
que en tu comunión aumento
tengan nuestra fe y amor.
Por tu amor y ricos dones,
¿qué podemos ofrecer?
Toma nuestros corazones,
nuestras almas, nuestro ser.
en tu santa ley vivir,
y que fieles te seremos,
Cristo, hasta el morir.