Rey de mi vida tú eres hoy;
en ti me gloriará;
yo por tu cruz salvado soy:
no te olvidaré.
Coro:
Después de tu Getsemani,
subiste a la cruz más cruel;
todo sufrió tu amor por mi:
yo quiero serte fiel.
Mas vi la luz amanecer
de la eternidad;
te vi, Señor, aparecer
con inmortalidad.
Rey de mi vida, Rey de luz,
en ti me gloriaré;
por mí moriste en la cruz:
no te olvidaré.