Más santidad dame, más odio al mal, más calma en las penas, más alto ideal;
más fe en el Maestro, más consagración,
más celo en servirle, más fe en la oración.
Más prudente hazme, más sabio en él, más firme en su causa, más fuerte y más fiel;
más recto en la vida, más triste al pecar,
más humilde hijo, más pronto en amar.
Más pureza dame, más fuerza en Jesús,
más de su dominio, más paz en la cruz; más rica esperanza, más obras aquí, más ansia del cielo, más gozo allí.