Guía a ti, Señor, guía a ti
los hijos tiernos que me has dado
a mi.
¡Oh, por tu grande amor. guíalos.
Dios, a ti!
Coro:
Guíalos, Dios, a ti,
guíalos, sí.
Cuando del mundo vean el esplendor, entonces guárdalos del tentador.
De sus engaños ¡oh, guíalos, Dios,
a ti!
Los niños a salvar vino Jesús,
y anduvo sin pecar hasta la cruz. Suplico por tu amor: ¡guíalos, Dios,
a ti!
Aunque me falte fe quiero creer
que este precioso don quieres tener; tiernos de corazón, hoy los vuelvo
a ti.