A la cruz de Cristo voy.
Débil, pobre y ciego soy.
Mis riquezas nada son.
Necesito salvación.
Coro:
Yo confío en ti, Señor,
mi bendito Salvador,
y me postro ante tu cruz.
¡Salva, oh sálvame, Jesús!
Suspirado he por ti,
mas el mal reinaba en mí;
hoy Jesús me dice fiel:
Tus pecados limpiaré.
Cristo, a ti mi todo doy. Tiempo, amigos, cuanto soy, cuerpo y alma, tuyos son
en eterna posesión.
Tu promesa es mi salud.
En tu sangre hallé virtud.
Pecador me siento hoy,
pero en Cristo salvo soy.